Martín Ferriz expone una “situación límite” y deja la Presidencia del CUC Villalba en manos de MAD Football Group
La situación institucional del CUC Villalba volvió a dar un vuelco este miércoles, con la dimisión del presidente, José Martín Ferriz, y la llegada del empresario italiano Piero Capponi como máximo responsable del club, al frente de un nuevo equipo directivo de seis personas y un proyecto diseñado para atajar la deuda desbocada que actualmente tiene en jaque al club villalbino: unos 200.000 euros, en palabras del presidente saliente, contando con que el club necesita generar 90.000 para poder equilibrar en junio el presente ejercicio económico.
Piero Capponi, director gerente de la empresa de consultoría deportiva, pasa a ser el nuevo presidente después de recibir el apoyo unánime de los socios en la Asamblea Extraordinaria de este miércoles: “Tenemos que buscar el equilibrio económico. No venimos a poner dinero ni a perder dinero. El Villalba tiene que estar en Tercera RFEF”
Capponi, director gerente de la consultoría deportiva MAD Football Group, puso a disposición del club la experiencia de su empresa en gestión de entidades deportivas, a través de un proyecto que contempla siete líneas de trabajo y que recibió el apoyo unánime de los socios en la Asamblea Extraordinaria celebrada en la sala de prensa de la Ciudad Deportiva. Su desembarco se produjo por aclamación, con la unanimidad de una masa social de nuevo alucinada por el volumen de deuda que estrangula al club.
El plan inicial del nuevo presidente era que Martín Ferriz siguiese en el cargo, pero el que fuera exguardameta del CUC Villalba dijo haber rechazado el ofrecimiento para centrarse exclusivamente en la parcela que domina, la deportiva. Ya es el nuevo director deportivo. Ese paso atrás llega tras varios meses de trabajo prácticamente en solitario, tras la anunciada dimisión de sus cuatro directivos y la pérdida como patrocinador de la empresa de energías renovables sobre la que se sustentaba su proyecto inicial. Martín Ferriz lo explicó salpicando la reunión con estas frases: “He estado un tiempo intentando dar soluciones. Voy a seguir, pero hay que tomar decisiones. El club está muy mal económicamente, en una situación límite, es increíble la deuda que hay. Y no veo que la solución sea que los socios pongan dinero. He encontrado un grupo de personas con un proyecto brutal”. Martín Ferriz no sólo recibió el apoyo masivo de la masa social para ejecutar el cambio, sino que también tuvo vía libre para realizarlo de inmediato, sin un nuevo proceso electoral: “No tenemos tiempo. Es ahora o nunca”, dijo.
El empresario italiano, cuyo grupo viene trabajando enclubes como el Aravaca CF, presentó un proyecto con siete áreas de trabajo y siete directivos, además de un organigrama que otorga a Martín Ferriz plenos poderes en la parcela deportiva
Deuda desbocada
Requerido por los socios, Martín Ferriz habló de cifras económicas escalofriantes: la pérdida del patrocinador principal ha generado una deuda adicional de 82.000 euros que se debe de devolver a su anterior equipo de colaboradores, que la inyectaron para salvar la anterior temporada y arrancar el actual proyecto; y a ella hay que sumar los 45.000 que se siguen adeudando a la anterior directiva de Jesús Mena, el único de aquella Junta que cobró su parte, 17.000 euros, algo que fue condición sine quanon para que Martín Ferriz tuviese acceso al cargo.
Mena, presente en la sala en calidad de socio, volvió a defender su gestión, y situó el problema de su último ejercicio en “el vacío de poder de muchos meses que nosotros no provocamos, y que hizo que se produjeran fugas de ingresos”. Según él, a su marcha “se había pagado todo a los jugadores, menos a Pepón, Santi y Bobby (técnicos del club)”. Su argumento chocó con el del único directivo dimisionario de Martín Ferriz presente en la sala, Javier Mejuto. El extesorero reveló que “al entrar se debían seis meses a los jugadores, y ahora sólo se debe el mes de diciembre”. Según su exposición, el reto de acabar la presente temporada al día pasa por generar 90.000 euros: “Prevemos que se necesitan 105.000 euros de aquí a junio para cubrir el presupuesto, y sólo tenemos previstos 15.000 de ingresos”.
El tremendo agujero presupuestario volvió a no ser explicado en detalle. Por ejemplo, Jesús Mena no fue requerido para explicar el embargo por parte de la Seguridad Social de la práctica totalidad de la subvención municipal al club, por importe de unos 8.000 euros, ni de los pagos pendientes en arbitrajes. Martín Ferriz pasó página y prefirió resumir la situación en una frase demoledora: “Se necesitan 200.000 euros”.
El nuevo proyecto de Capponi
Tras el debate, Piero Capponi tomó la palabra y expuso el proyecto de su empresa, MAD Football Group, con el que pretende reflotar el CUC Villalba en base a siete líneas de trabajo: respaldar al primer equipo para que logre el ascenso a Tercera RFEF; dotar al club de estabilidad económica; consolidar la cantera y crear una Academia de fútbol; colaborar con el territorio, en este caso Collado Villalba y su tejido social y empresarial; profesionalizar la entidad; y aportar valores. Para ejecutarlo, el nuevo presidente presentó un equipo de seis directivos: Juan Ignacio Ribara (vicepresidente); Álvaro Rodríguez (tesorero); Marcia Cruzado (secretaria); y los vocales Zazu Rodríguez, Lora Galeva y Mauricio López. Capponi presentó un organigrama dividido en cuatro grandes áreas: la dirección deportiva, que llevará con plenos poderes Martín Ferriz, y en la que se recupera la figura del secretario técnico en la persona de Sergio Vázquez; las Relaciones Institucionales, con Mauricio López; la coordinación general, con Marcia Cruzado al frente; y la Dirección de Comunicación, con Rafael Rodríguez como máximo responsable.
El proyecto de Piero Capponi y su empresa MAD Football Group fue respaldado por unanimidad a renglón seguido de la dimisión de Martín Ferriz, superada la hora y cuarto de reunión. No hubo ni un voto en contra y el nuevo presidente recibió el aplauso de la sala, antes de situar su objetivo inmediato en “poner a los jugadores al corriente de pago”. Este jueves, Capponi tiene ya previsto visitar a la plantilla en el entrenamiento para presentar a su equipoy lanzar un primer mensaje de tranquilidad, algo que ya hizo la semana pasada Martín Ferriz.
El ya expresidente expuso una situación crítica en el plano económico, tras la marcha del anterior inversor: casi 130.000 euros de deuda y la necesidad perentoria de lograr otros 90.000 para terminar la temporada, objetivo que pasa a ser prioritario para la nueva directiva
El empresario italiano se estrenó ante los socios resumiendo su plan en varias frases categóricas: “Hemos visto las cuentas, sabemos la situación porque nosotros analizamos todas las áreas. Tenemos que estrujar Collado Villalba, que es una ciudad de 67.000 habitantes con muchas posibilidades, porque tiene mil empresas; y tenemos que buscar un equilibrio económico. No venimos a prestar dinero ni a perder dinero, venimos a trabajar mucho, porque el CUC Villalba tiene que estar en Tercera RFEF”. Capponi avanzó que, de lograrse el ascenso, el presupuesto saltará de 240.000 a 300.000 euros, de acuerdo con los baremos que su empresa ha aplicado con éxito en otros clubes.
Jaime Fresno