El Galapagar cierra su gran temporada con un empate en Torrejón, pero aún siente la remota amenaza de los arrastres
El Galapagar echó el cierre a su histórica temporada de debutante en Tercera con un empate en Las Veredillas ante la AD Torrejón (1-1), para acabar con 56 puntos y firmar el mejor estreno de un equipo serrano en categoría nacional, pero su permanencia más que virtual en la categoría aún está pendiente del último fleco: que no bajen a la vez los dos equipos madrileños de Segunda RFEF que todavía no se han salvado matemáticamente; el Leganés B y, sobre todo, el Móstoles URJC, en claro peligro tras caer a zona de descenso directo este domingo con su derrota en Arosa.
Los arlequinados terminan con 56 puntos, el mejor registro de un debutante serrano en categoría nacional, pero el hecho de que todavía puedan bajar a la vez a Tercera el Móstoles y el Leganés B hace que su 12ª posición final no le garantice al 100% la permanencia ganada a pulso en el campo
Quedan dos jornadas que mantendrán en vilo al fútbol madrileño, pero las posibilidades de que los famosos arrastres terminen afectando al Galapagar siguen siendo muy remotas: una vez salvado el arrastre del Móstoles, eludiendo matemáticamente la 13ª plaza, al equipo serrano sólo le falta que el Leganés B haga valer sus cuatro puntos de ventaja sobre el descenso a falta de sólo seis por jugar. Si el filial pepinero gana el domingo al Arosa, estará hecho; si no, el calendario salpicado de duelos directos entre implicados, más el hecho de que Gimnástica Segoviana y Langreo estén intercalados entre Leganés B y la zona roja, podría ya dar por buenos los 42 puntos que ya ha sumado. Si ello no bastara, a favor del Galapagar también juega la posibilidad de que un segundo ascenso madrileño a Segunda RFEF desactive el peligro de la 12ª posición, creando el hueco necesario para absorber la hipotética caída pepinera.
El Leganés B tiene en su mano la salvación: pese a perder en el Suárez Puerta ante el Real Avilés, mantiene cuatro puntos de ventaja sobre la promoción y el descenso a falta de dos jornadas, y además tiene intercalados a dos equipos entre su 10ª posición y la zona roja; la Gimnástica Segoviana y la Unión Popular de Langreo
Como tantas veces sucede en el fútbol, las matemáticas son las que bendicen los objetivos y hay que contemplarlas, sin que ello quite libertad de celebrar éxitos con la etiqueta de virtuales: el Galapagar sólo descenderá si se da una hecatombe a tres bandas. Y en ese caso, sentaría un precedente de difícil digestión a nivel federativo, puesto que sería el décimo descendido en una liga de 21 equipos, una ignominia que atenta contra el espíritu mismo de la competición y que ya está levantando muchas críticas por parte de los clubes implicados.
Héctor hace historia con su gol número 21
Consciente de lo peculiar de esa situación, el Galapagar salió decidido a ganar en Las Veredillas, días después de celebrar en El Chopo la permanencia ganada a pulso en su ya histórica campaña. Suya fue la primera ocasión, tras una combinación entre Kike Falcón y Héctor en la que el ariete obligó a una buena parada del meta Kike Reguero, pero el Torrejón no tardó en responder, sobre todo con acciones de su máximo realizador, Doménech. Ese alto ritmo de salida terminó dando rédito al Galapagar, que se adelantó en el marcador gracias a un penalti cometido sobre Sergio Mas que se encargó de transformar Héctor. Fue el gol número 21 del ariete arlequinado, que le sirve para empatar con la máxima anotación de un delantero serrano en categoría nacional en lo que va de siglo, en poder desde 2007 del catalán del CUC Villalba, Toni Corbella.
El 0-1 evitaba de forma provisional cualquier problema del Galapagar con los arrastres y se los trasladaba al Torrejón, pero el cuadro local, lejos de acusar esa presión, siguió atacando y estuvo cerca de empatar en varias ocasiones antes del descanso. Su premio llegó en la segunda parte, cuando un error defensivo de los serranos fue aprovechado por Doménech para servir a Nachete el gol del empate. Con más de media hora por delante, ambos equipos siguieron buscando la victoria y se repartieron buenas ocasiones para deshacer el empate. El Galapagar tuvo el 1-2 en un remate muy claro de Kike Falcón que se marchó fuera por poco, pero el Torrejón también estuvo cerca de decantar la balanza en un centro chut de Cuevas que repelió el travesaño, como opciones más destacadas.
Héctor adelantó al Galapagar de penalti, un gol que le hace igualar el récord anotador de un jugador serrano en Tercera, con 21 tantos, pero el Torrejón respondió empatando el partido en la segunda parte por mediación de Nachete
Al final, el reparto de puntos dejó libre de polvo y paja al Torrejón, que cierra la liga a salvo en la décima posición, e invita al Galapagar a echar un ojo al partido de este domingo entre el Leganés B y el Arosa (12:00 horas). Si hay victoria pepinera, el último peligro se habrá desactivado.
Descenso del Tres Cantos
La jornada final en Tercera RFEF completó el cupo de los siete descensos directos con el Tres Cantos, cuya derrota ante el Alcorcón B (2-0) le impidió aspirar a desbancar de la 14ª plaza a un Parla que, por si acaso, ganó por 0-2 en Usera al Moscardó. Los parleños celebraron su permanencia sobre el césped del Román Valero a falta de atar dos flecos: que no bajen ni Móstoles ni Leganés B, y que suba a Segunda RFEF uno de los cuatro madrileños del playoff. Por encima suya quedan también en vilo el Trival Valderas, como noveno por abajo, y un Galapagar ya sólo pendiente de que no se produzca una debacle madrileña a tres bandas. Su conciencia debe de estar tranquila: ha salvado como debutante el mayor cupo de descensos de la historia de la categoría.
Jaime Fresno