Carlos Verona pierde la opción del top-10 en la cronoescalada final del Tour de Romandía

El sanlorentino se tuvo que conformar con la 16ª plaza de la General, a 3:02 minutos del ganador, el ruso Aleksandr Vlasov, pero a cambio se desenvolvió a gran nivel en la montaña de la ronda suiza.

Carlos Verona no pudo asaltar el top-10 del Tour de Romandía en la cronoescalada final a Villars, en la que fue 25º, a 2:31 minutos del ganador de la etapa y también de la ronda suiza, el ruso Aleksandr Vlasov. El sanlorentino cedió tres posiciones en la General, hasta caer al 16º puesto, y se quedó sin poder repetir su gran actuación del UAE Tour, donde fue sexto. Según él, no encontró su máximo nivel en la quinta y última etapa de la ronda suiza, a la que llegaba con grandes sensaciones tras acabar con los mejores en la etapa reina del día anterior, aunque se mostró satisfecho en líneas generales: “Pienso que estuve en mi sitio. En un muy buen día podría haberlo hecho mejor, en un día malo peor, y ayer -por el domingo- estuve ahí, en los números que cada vez suelo mover más frecuentemente y con más solvencia, y que creo que son los que me han ayudado a dar un pasito más adelante este año”.

Las expectativas sobre un nuevo top-10 del ciclista serrano eran muy buenas, sobre todo tras comprobar su gran nivel en las exigentes etapas que precedieron a la cronoescalada, que le había situado a menos de un minuto del liderato del australiano Rohan Dennis. Carlos Verona se dejó ver en la tercera etapa, en la que lanzó un gran ataque a falta de 10,5 kilómetros, en plena ascensión a la última cota de la jornada, Sedeilles, de tercera categoría, pero fue neutralizado a 400 metros de coronar el alto, después de abrir un hueco que llegó a ser de 12 segundos.

Tras sufrir para pasar la pancarta de montaña con los mejores, logró alcanzar la meta en el mismo tiempo del ganador, el neozelandés Patrick Bevin, y dejó claro que podía codearse con los favoritos, algo que refrendó en la gran jornada alpina del sábado, con 4.000 metros de desnivel y cuatro puertos de primera categoría. En ella, Movistar jugó desde lejos, metiendo en fuga a Óscar Rodríguez, y reservó a Einer Rubio y a Carlos Verona para el duro encadenado final de dos puertos, donde en principio se debía decidir la carrera. El joven colombiano atacó al final y sólo pudo ser neutralizado a 400 metros de la meta, mientras Verona aguantó en el grupo de los mejores y firmó la décima posición en el mismo tiempo del ganador, el colombiano Sergio Higuita.

Verona volverá a competir a partir del 5 de junio en el Critérium Dauphiné, la antesala de su gran objetivo del año, el Tour de Francia

Con el Tour en el horizonte

Carlos Verona admitió que “personalmente esperaba más del resultado, pero me marcho muy satisfecho con el rendimiento, y es que en los 23 días de competición que llevo este año, pienso que he estado sólido y a un muy buen nivel; es con lo que me quedo”.

Tras su buena actuación en Romandía, Verona descansará en este inicio de mayo antes de empezar a inspeccionar la semana que viene alguna de las etapas del próximo Tour de Francia, la carrera más importante de su calendario y gran objetivo del Movistar. El sanlorentino regresará después a Andorra para concentrarse en altura y volverá a la competición en el Critérium Dauphiné, antesala del Tour de Francia, que se celebrará en ocho etapas, del 5 al 12 de junio.   

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