Carlos Verona: “Hay que seleccionar muy bien cómo y cuándo se gastan las fuerzas”
El sanlorentino sale sin problemas de las tres etapas de Dinamarca, colocado a 2:30 minutos del líder Van Aert y con su jefe Enric Mas a 1:03, antes de que la carrera se reanude este martes en Dunkerque y afronte el miércoles la peligrosa etapa de los adoquines, camino de Arenberg.
Carlos Verona ya está en tierras francesas con el equipo Movistar, tras superar sin apenas problemas las tres etapas danesas con las que ha arrancado el Tour. El sanlorentino se reservó en la contrarreloj inicial de Copenhague y, en el fin de semana, se aplicó en arropar a Enric Mas en las dos primeras etapas en línea, en las que se produjeron menos movimientos de los previstos.
El saldo deja a su jefe de filas balear a 1:03 minutos del líder, el belga Wout Van Aert, y a 49 segundos de la tercera plaza del podio, que marca el bicampeón y gran favorito, Tadej Pogacar. “El balance de estos tres días es un poco peor de lo que esperaba yo, con los segundos cedidos en la crono, pero al menos estoy contento porque estos dos días he podido salvar bastante bien”, dijo el balear, ya concentrado en salvar la jornada clave de los 11 tramos adoquinados, que llegará este miércoles, después de que mañana martes se reanude el Tour con la primera etapa por territorio francés, entre Dunkerque y Calais.
Verona llega al primer momento crítico del Tour en buena situación: pese a estar en el puesto 136 de la General, a dos minutos y medio de Van Aert, lo importante es que no se ha visto involucrado en ninguna de las muchas caídas que se han producido, entre ellas la de su compañero, Matteo Jorgenson, “que sigue en carrera sin problemas, pero con varios puntos de sutura en el codo”, y siendo consciente de que “hay que seleccionar muy bien cómo y cuándo gastar las fuerzas”. Su primer gran test llegará en la séptima etapa, la que acaba en la subida a la Planche des Belles Filles.
Traslado a Francia
Los ciclistas del Tour han llegado a Francia en tres vuelos chárter fletados por la organización para salvar los mil kilómetros de traslado de traslado desde Dinamarca, un viaje que los auxiliares, los autobuses de los equipos y demás logística ha realizado por carretera hasta alcanzar la ciudad de Lille, donde este lunes transcurrirá la primera de las tres jornadas de descanso de la carrera. Mañana martes el Tour se reanudará con una fracción de 171 kilómetros entre Dunkerque y Calais que incluye seis ascensiones de cuarta categoría.