Quique Casado frena en seco al Cerceda en Puente Madrid (0-1)

Quique Casado, que sigue diciendo no estar del todo bien, decidió el gran derbi serrano de Puente Madrid con un zurriagazo desde 25 metros que resultó inapelable para Álex, siete días después de su doblete al Colmenar B. El disparo, propiciado por un robo de balón de Víctor Omaba sobre Fran, puso por delante al Atlético Leones a las primeras de cambio, en el minuto siete, y el Cerceda ya no tuvo manera de evitar la derrota, pese a ejercer un amplio dominio del balón y generar casi todas las ocasiones de gol, manteniendo esa línea de juego que tantas otras veces le había valido para puntuar. Lo intentó todo, pero en su derrota tuvo mucho mérito el Leones, que se manejó con cierta comodidad defendiendo, pleno de solidaridad y aplicación en cada duelo.

El equipo de Joe Maset, todavía convaleciente de su irregularidad, del varapalo anímico que le supone verse lejos en la clasificación, entendió que los resultados van antes que el juego, salió preparado para igualar la intensidad de su rival y se encontró con que la superaba. Fue mejor de salida y, una vez por delante, dejó hacer, supo sufrir, e incluso tuvo una fase en la segunda parte en la que pudo terminar de meter el cuchillo, en una acción al contragolpe vertiginosa fabricada por Casado, que Víctor acabó culminando en gol, anulado finalmente por fuera de juego.

Dominio infructuoso del Cerceda

El latigazo de Casado dejó con muchas dudas al Cerceda, si bien los de Juan Carlos Martín Puga pudieron contestar de inmediato, en una falta bombeada al área por Fran que Paletas cabeceó y Carlos desvió al larguero, metiendo una mano espléndida. La jugada rebajó los ímpetus de salida del Leones y terminó por dar al Cerceda un dominio territorial que, de forma paulatina, le fue aproximando al empate, más por empuje que por juego. A los 16 minutos, Sergio Izco se asoció con Pepo y éste, en buena situación, disparó demasiado alto, en la primera aparición del joven atacante. A la segunda, la gran sensación cercedeña desbordó en la derecha y se fue de hasta tres rivales pegado a la raya de fondo, pero le faltó ángulo para culminar lo que hubiese sido un gol de pañuelos.

El Cerceda generó varias ocasiones claras para empatar y acabó atacando con cuatro delanteros, pero el Leones se mantuvo firme con un gran ejercicio de solidaridad defensiva

Sin Sergio Vázquez, cuya baja por tarjetas se reveló muy sustancial, el Cerceda dio el carril derecho a Izco, con Ayoub en el izquierdo, y el tradicional liderazgo en el eje de Raúl San Juan, que acabó siendo de lo mejor del mejor del equipo, con el Leones atando bien en corto a Adri y De la Vega en el medio, y Paletas obligado a buscarse la vida entre la bien armada defensa guadarrameña, en la que Nacho Rueda e Iván rayaron a gran altura. Con todo, el ariete cercedeño se las ingenió para controlar entre ellos un balón llovido, girarse rapidísimo tras un gran control, y chutar casi a quemarropa ante Carlos. El portero sostuvo al Leones con una gran intervención justo antes del descanso.

De susto en susto

El paso por vestuarios no alteró el guión de dominio local y el sentido administrativo del Leones, que a diferencia de la primera parte arrancó de susto en susto. Nada más empezar, Sergio Izco combinó con Pepo en la derecha y el joven extremo encaró a Carlos, pero el portero le sostuvo el mano a mano achicando ángulos, y a renglón seguido pudo marcar Raúl San Juan en una de sus subidas. 

Ésa fue la última gran aparición de Pepo, que a partir de ahí fue bien controlado, y eso que Juan Carlos Martín Puga acabó ordenando el ataque total, metiendo a su hermano, Nacho, y a Kiko para jugar con tres delanteros y retrasar a Paletas a la tarea de lanzador por detrás. En cierto modo, algo tenía que hacer el técnico local, pues el Leones no se vio exigido una vez superados los primeros ímpetus locales, y Casado y Víctor encontraban espacios para inquietar, como se vio en el gol anulado.

Segunda victoria consecutiva del Leones

No obstante, la carga total tuvo un efecto más defensivo que ofensivo, con el Leones terminándose de convencer de que lo suyo era defender. Y lo hizo a la perfección, puesto que, de ahí al final, sólo Kiko, con un cabezazo picado abajo en posición franca, amenazó con el empate, después de un buen centro desde la izquierda de Ayoub. El despliegue del carrilero cercedeño en esa banda fue brutal, subiendo y bajando, y de sus botas partieron un par de pases filtrados al área que fueron de lo más destacable en el ataque del Cerceda, pero la respuesta de la última línea del Leones siempre fue impecable. Fiado a ella, el cuadro de Guadarrama puso a buen recaudo su segunda victoria consecutiva, algo que no sucedía desde las jornadas 2 y 3, justo antes de que, cosas del fútbol, el propio Cerceda acabara con la secuencia en el Nuevo Raso.

La devolución de moneda afianza a los de Maset en la zona tranquila y hace que el Cerceda pierda el paso del ascenso, ahora a cuatro puntos tras la victoria del Adarve B, antes de tomar la carretera de Colmenar para visitar al Siete Picos.         

Jaime Fresno