Las Rozas gana con polémica al Alcalá en un partido para los anales del fútbol madrileño (5-4)

Los de Carlos Rodríguez se distancian en siete puntos del Alcalá y se mantienen a ocho del líder, un Atlético de Madrid B que derrotó por 2-0 al Pozuelo

Navalcarbón vivió una mañana memorable, zanjada con la victoria de Las Rozas sobre el Alcalá con un marcador propio de la era romántica, 5-4, y consecuente con un partido que ya está en los anales del fútbol madrileño, por sus vaivenes y sus goles, pero también por su polémica, que resultó cruel con el equipo complutense: con 4-4 y el reloj sobre el tiempo reglamentario, el colegiado, Muñoz Moreno, obvió un claro penalti por mano de Gonzalo Expósito en el área roceña y, acto seguido, se montó el contragolpe con el que Javi Carbonell, de nuevo decisivo, marcó el definitivo 5-4 para desatar la euforia entre los seguidores azulones. Fue un final muy duro para el Alcalá y, pese a todo, un desenlace que premió la insistencia de Las Rozas, que supo sobreponerse a fases de partido en las que se vio claramente superado.

Salida fulgurante

Consciente de lo que había en juego, Las Rozas tuvo un comienzo fulgurante en el partido: a los dos minutos, Alberto Cuéllar rompió por la banda derecha y sirvió a Carbonell el 1-0; y poco después, Alberto Salido forzó un penalti ante el meta Aarón y él mismo se encargó de colocar el 2-0. Los de Carlos Rodríguez tenían el partido donde querían, gracias al comienzo soñado, pero entonces el Alcalá se levantó de la lona gracias a la entrada en juego de sus mejores hombres.

Izan, uno de los jugadores más determinantes del Grupo VII, forzó otra pena máxima que significó el 2-1 de Malote, y el control del partido pasó a ser visitante. Sobre la media hora, Izan volvió a aparecer para marcar el 2-2, usando su calidad en los golpes franco, y el dominio rojillo creció exponencialmente hasta desembocar en la remontada completa, que llegó a tres minutos del descanso con el gol de Chato para el 2-3.

Espectacular duelo de aspirantes en Navalcarbón, con el Alcalá remontando un 2-0 con tres goles antes del descanso, la contestación de Las Rozas para ponerse 4-3, el empate a cuatro de los complutenses jugando en inferioridad, y el gol decisivo de Carbonell sobre la hora, después de un penalti no pitado en el área roceña.

Intercambio de golpes y frenesí final

Tras el descanso, Las Rozas no encontró la forma de rehacerse a los mazazos recibidos en la primera parte, ante un Alcalá que, con el botín de la victoria provisional, disminuyó su ritmo y se concentró en anular a su rival. Sin embargo, la controvertida expulsión por doble amarilla de Favio, una pieza clave del centro del campo alcalaíno, dio un nuevo giro al partido. Carlos Rodríguez no tardó en meter a Tito Malagón y a David Flores, y el delantero se erigió en el gran protagonista de la nueva remontada, primero con un gran disparo para establecer el 3-3, y después rematando de cabeza un buen centro desde la derecha Alberto Salido para el 4-3.

Manejándose en superioridad numérica, ese gol pareció definitivo para tumbar al Alcalá, pero al cuadro de Jorge Martín de San Pablo aún le quedaban balas. Ángel, uno de sus hombres de refresco, se sacó un disparo muy lejano que Álex Quesada introdujo en la portería en su intento de despeje, y el partido dio su enésimo giro a 12 minutos del final. Con el 4-4 y jugando con diez, el Alcalá siguió atacando, pero Las Rozas tampoco cejó en su empeño de insistir en busca de la victoria.

En su ocasión más clara, Alberto Salido vio cómo Aarón le sacaba un disparo de gol, pero el gran partido que se estaba viendo tenía reservado un desenlace de la máxima crueldad para el Alcalá. Sobre la hora, llegó la mano de Expósito que Muñoz Moreno no vio y, de inmediato, Alberto Salido habilitó a Carbonell con un pase filtrado para que el 7 hiciese el definitivo 5-4 con una vaselina sobre el portero que acabó lentamente en las mallas. Fue el 16º gol en Liga del nuevo Pichichi de Tercera, el que sirvió para reafirmar a Las Rozas en su papel de principal perseguidor del Atlético de Madrid B, tras cuatro victorias consecutivas.

El líder no perdonó ante el Pozuelo (2-0), pero sabe desde hace tiempo que no se puede descuidar ante un rival tan pleno de pegada y fe como es Las Rozas, capaz de tumbar a un gran Alcalá en un partido para la Historia del Grupo VII de Tercera División.

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