Joe Maset: “El Atlético Leones es un club histórico y el objetivo a medio plazo es devolverlo a Preferente”

El Atlético Leones de Castilla volverá a rugir en Primera Regional, su sitio natural, la categoría de la que nunca había bajado tras alcanzarla por vez primera hace casi 40 años, hasta que la perdió hace siete temporadas como consecuencia de una profunda crisis económica. El pasado 15 de mayo, arropado por los más de 300 espectadores que se dieron cita en el Nuevo Raso, el histórico club de Guadarrama selló su regreso a cuatro jornadas del final de la Liga en Segunda, con una victoria por 4-0 ante la ADC Castilla que desató una gran fiesta de color verdiblanco.

Pocos, por no decir ninguno de los presentes, tenían dudas de que el gran objetivo caería como fruta madura en la tarde del día de San Isidro, después de la derrota a mediodía del Villaviciosa B. El único equipo que albergaba remotas opciones de coger al Leones en la segunda plaza perdió en Colmenarejo en el último minuto por 4-3 ante la Gimnástica, después de ir ganando por 0-2. Toda una señal que abrió de par en par la posibilidad de celebrar la consecución del ascenso al calor del Nuevo Raso. Joe Maset, el entrenador que ha pilotado el éxito, lo califica de “alegría inmensa”. “El ascenso es algo que llevábamos buscando desde la temporada pasada, cuando el club confió en mí para coger este proyecto. El club es un histórico que siempre ha estado entre Preferente y Primera Regional, era algo que teníamos que conseguir:devolver al pueblo y al club donde se merecen. Lo hemos logrado y estamos súper contentos”.

Hace tres años, el Leones había logrado dar el primer paso en su particular escalada desde el pozo de Tercera Regional, al que había caído prácticamente en picado víctima de las desviaciones presupuestarias de los años en Preferente. Lo hizo con el ascenso a Segunda logrado bajo la dirección de Miguel Ángel Zapatero, pero ese logro no podía ser suficiente para uno de los tres clubes de fútbol serranos con más trayectoria en el máximo nivel de la Regional madrileña, junto al CUC Villalba y el Galapagar. Maset admite que palpó desde el principio la necesidad de saldar esa deuda deportiva: “Desde que llegué al club esa presión de ascender siempre ha estado, el club tiene una historia detrás y eso al final pesa. Según nos íbamos acercando a la posibilidad de ascender, la presión se iba notando. Ganábamos y ganábamos y eran muchas jornadas sin perder, pero no conseguíamos materializar el ascenso. Nos hemos quitado un peso de encima”.

Celebración con videollamada

El entrenador explica que el domingo del ascenso fue muy largo: “Fuimos un jugador y yo a Colmenarejo a ver al Villaviciosa B, que se puso además ganando 2-0. Lo veíamos un poco complicado, pero al final, no sabemos cómo, el Colmenarejo consiguió remontar. La última jugada fue un penalti a favor de la Gimnástica, e hicimosuna videollamada en la que estábamos todo el equipo y nosotros grabando; lo celebramos como si fuera un gol nuestro. Por la tarde sabíamos que había que ganar, por nosotros, por el pueblo y por toda la gente que fue al partido. Luego, además sumamos que el Nuevo Boadilla no consiguió ganar, con lo que la jornada salió redonda”.

El Atlético Leones se colocó líder para tomar la iniciativa en su segundo objetivo, el de ser campeón de Liga. Un doble motivo de celebración que jugadores, cuerpo técnico y directiva llevaron a ras de césped, mientras eran jaleados desde la grada del Nuevo Raso. Joe Maset fue manteado por sus jugadores en varias ocasiones, mientras el presidente, José Herrera, mostraba la emoción propia de quien vivió en su momento la caída al sótano de la Tercera Regional y ahora disfruta observando cómo su equipo deja atrás su mayor bache deportivo, al menos en lo que va de siglo. El dato es muy llamativo: el Atlético Leones nunca había bajado de Primera Regional desde el ascenso logrado a mediados de la década de los ochenta -entonces todavía como equipo de la Federación Castellana-, hasta que cayó en la temporada 2014/2015 después de tres décadas moviéndose entre esa categoría y la Preferente, la máxima de la Regional tras la constitución de la Federación de Madrid en 1988. Desde ese punto de vista, el ascenso del pasado 15 de mayo marca un hito muy relevante en los 64 años de existencia de la entidad de Guadarrama.

De menos a más

El 4-0 a la ADC Castilla con el que se remató el ascenso supuso en ese momento igualar el récord de imbatibilidad del Atlético Leones, establecido en los 21 partidos sin perder de las temporadas 2001/2002 y 2002/2003, respectivamente con Pedro Hernández y Francisco Domínguez en el banquillo verdiblanco. A fecha de hoy, el equipo sigue subiendo ese listón y ya va por 23 jornadas seguidas puntuando, tras el empate sin goles logrado en el duelo en la cumbre ante el Nuevo Boadilla y la victoria por 5-1 del pasado domingo sobre El Escorial.

La racha que mantiene invicto en 2022 al Leones se inició en noviembre, después de perder en Hoyo de Manzanares,en un partido que Maset ve como un claro punto de inflexión: “Empezamos algo irregulares en las primeras jornadas pero, a raíz del partido que perdimos en Hoyo, el equipo dio un cambio de cara, sumamos muchas jornadas sin perder y eso nos llevó a materializar el objetivo”.

Los números globales hablan por sí solos: el Leones sólo ha sido derrotado en tres partidos y ha cimentado el éxito con la mejor defensa de la Liga, con sólo 27 tantos encajados, y el tercer mejor ataque, con 84 goles, un apartado en el que sobresalen los 28 que ha marcado hasta el momento Hugo Arribas, además de los 23 que han aportado entre Raúl y Víctor Omaba. Con ellos, el Leones ha logrado paliar el hándicap de no poder contar con regularidad con uno de sus grandes fichajes, Álex Seidel, cuyas lesiones no le han permitido mostrar toda su calidad a la afición guadarrameña. En contrapartida, el liderazgo de Gallego, otro de los grandes nombres en el equipo, ha sido clave para dar seguridad y consistencia. El gran central guadarrameño, fichado por el CUC Villalba en el año del descenso a Segunda, ha regresado a casa a tiempo de recuperar la categoría perdida entonces.

Joe Maset explica que el encaje de piezas llevó su proceso:“Al principio nos costó. Reforzamos la plantilla con varios jugadores, y hasta que nos hemos adaptado con los jugadores nuevos al sistema… Teníamos una idea al principio que hemos tenido que ir modificando según íbamos metiendo a los nuevos jugadores que hemos incorporado. Hasta que no encajamos todo, no terminamos de arrancar. Pero tampoco tardamos mucho en hacerlo y, bueno, aquí están los resultados”. El entrenador no oculta que el ascenso logrado con el Leones es un importante paso en su carrera: “Creo que sí, porque llevaba tiempo buscando esto. Es la primera vez que tengo la oportunidad de coger un equipo con esta proyección y con este objetivo de poder ascender. El año pasado estuvimos muy cerca, después de una temporada dura con lo del Covid y de que se me fuera toda la plantilla y se quedaran sólo cuatro jugadores. Al final, en dos temporadas hemos rehecho el equipo y lo hemos devuelto a Primera Regional”.

Objetivos ambiciosos

El Atlético Leones afronta las dos jornadas finales como líder con un punto de ventaja sobre el Nuevo Boadilla, dependiendo de sí mismo para ser campeón. Su gran rival por el título nada podrá hacer para impedirlo, si los verdiblancos ganan los dos partidos que les quedan: el de este domingo en campo del DUX Internacional B, y el de la jornada final en el Nuevo Raso frente al Villaviciosa B. “Les he dicho a los jugadores que tenemos que intentar tener mentalidad ganadora, y nada mejor para eso que conseguir ganar la Liga. Vamos a ir a por ella”, avisa un Joe Maset que traslada esa ambición también al próximo año: “El proyecto que tenemos no es sólo quedarnos en Primera. El Leones es un club histórico y el objetivo, a corto o medio plazo, es devolverlo a Preferente. Con esa idea vamos a trabajar de cara a la temporada que viene. No hemos empezado a mover nada, por respeto a la competición, a la plantilla y al resto de equipos, pero es verdad que tenemos que empezar a trabajar en estas semanas”.

La otra meta más allá de lo deportivo pasa por recuperar definitivamente a la afición de Guadarrama, que todavía recuerda con nostalgia los grandes ambientes futbolísticos del viejo estadio de El Raso, con la grada llena alentando al equipo a un par de metros de la línea de banda. Masetno estaba entonces, pero ello no le impide tener conciencia de la importancia de recrear aquellos ambientes: “Lo del público era una tarea pendiente, porque se había perdido un poco. Sí que es verdad que aún cuesta, porque a pesar de que en estos partidos ha habido mucha gente en el campo, muchas veces la sensación ha sido distinta, por la grada tan grande que hay. Eso lo hemos ido recuperando en estas últimas jornadas y la verdad es que el público estaba con una ilusión enorme de que el equipo volviera a Primera Regional. Ibas por la calle y te paraban: la gente, los políticos, ahora también la prensa… Hemos vuelto a recuperar la ilusión por el club que tanta falta hacía”.

Jaime Fresno