Un Electrocor pleno de entrega choca con Las Rozas B y cae a Primera Regional (1-1)

La extraordinaria remontada del Electrocor Las Rozas hacia la salvación quedó sin efecto en la jornada final de Preferente, en la que no se dieron ninguna de las dos premisas que necesitaba: el Sanse B quedó fuera de alcance ganando al Colmenar (1-0) y los rojillos no pasaron del empate ante Las Rozas B (1-1), en un derbi pleno de intensidad y colorido en las gradas de El Abajón. El Electrocor no estuvo en ningún momento de la mañana fuera del descenso, porque no pudo adelantarse en el marcador y porque el Sanse B, en el arranque de la segunda parte, elevó el dique con su gol al Colmenar. Pese a todo, el grupo de Nacho Pérez realizó un derroche de energía constante en El Abajón, ante un Las Rozas B que, aun sin la amenaza de Koné y con las bajas por sanción de Conde y Javi del Val, opuso el juego y el oficio necesarios para aguantar el pulso.

A ello contribuyó el penalti por mano con el que el filial se adelantó en el marcador a los 19 minutos, poco después de que Penabella no acertase por centímetros a culminar en boca de gol un excelente servicio de San Román desde la derecha. David puso el 0-1 desde los once metros, abrochando su disparo de zurda al palo contrario de la estirada de Vegue, y el partido entró en una fase muy delicada para el Electrocor, que se vio amenazado en varias ocasiones por la velocidad azulona en tres cuartos. Sobre la media hora, Adrián, muy incisivo en la izquierda, buscó el gol con un tiro cruzado al que respondió Vegue tapando bien el palo largo, pero el protagonismo de los porteros no tardó en cambiar de área: al 37 de la primera parte, Penabella maniobró en el balcón del área y, tras irse en reverso de su par, soltó un disparo seco rumbo a la escuadra que hizo volar a Pablo para evitar el empate. La acción precedió al 1-1 de Miki Navares, gestado en un cambio de juego de Alcoba hacia la izquierda que vino devuelto al corazón del área, para que el ex del CUC Villalba metiese la bota y le saliese un remate cruzado que se convirtió en el empate.

Animado por el gol, el Electrocor metió una marcha más en la segunda parte y, nada más empezar, volvió a estrellarse en la inspiración y cualidades de los porteros del equipo de David García Aguilar. Esta vez fue Rodrigo el que metió una mano salvadora junto al larguero para sacar otro duro disparo de Penabella, quien había ganado el área gracias a una rápida transición por la izquierda. Fue ésa la banda por la que se prodigó Lander, quien hizo suyas las mejores jugadas de la segunda parte. En una de ellas, el menudo extremo se escurrió entre dos defensas, ganó la línea de fondo y, ya en el área, fue barrido por detrás. Ferrero Melchor no apreció penalti, ante las protestas de El Abajón.

Una hipotética victoria rojilla no hubiera valido para lograr la permanencia en Preferente, dado que el Sanse B terminó ganando al Colmenar (1-0)

Mediada la segunda parte, Nacho Pérez dobló la apuesta arriba con Álex Arroyo, y no tardó en echar mano de Aguilera. El Electrocor mantuvo el vigor: Rubio rozó el 2-1 en un cabezazo franco que se marchó cerca de la cruceta, Aguilera se topó con otra gran parada de Rodrigo, a disparo raso y ajustado al palo, y Lander cruzó demasiado un disparo raso y en carrera, después de otra internada marca de la casa.

Fue la última ocasión de un Electrocor que acabó sin fuelle en los minutos finales, tramo en el que Las Rozas B encontró los espacios para ganar el partido. Pudo hacerlo en un mano a mano de Galán con Vegue, pero el portero obligó al delantero a escorarse demasiado, y luego la segunda línea azulona no acertó a embocar a puerta casi vacía. Para entonces, la suerte del Electrocor ya estaba echada, y su gente se dispuso a premiar a los jugadores con un reconocimiento a su despliegue, y sobre todo por alimentar el sueño de la permanencia en una segunda vuelta saldada con 28 puntos, números cercanos a los de un candidato al ascenso.

Nacho Pérez, con fuerza para seguir

Consumado el descenso a Primera Regional, el Electrocor Las Rozas ya piensa en cómo volver a Preferente, y el futuro inmediato pasa por decidir si marca o no un cambio de ciclo. Nada más acabar el partido, Nacho Pérez, el hombre que ha llevado al club rojillo hasta su mayor cota en 30 años, no pudo contener las lágrimas y se encerró con sus jugadores en el vestuario. “Han sido cinco minutos de silencio sepulcral. Las caras de los jugadores son de mucha tristeza”, admitió el entrenador, antes de mostrarse categórico en sus deseos de continuar al frente de la nave rojilla: “Siempre he dicho que mi prioridad es continuar aquí, ésta es mi casa, mi total preferencia e ilusión es entrenar al Electrocor. Mientras el club no me diga lo contrario, yo voy a seguir en Primera Regional para intentar subir a Preferente”. Según ha podido saber AQUÍ EN LA SIERRA, el futuro en el banquillo del Electrocor, con o sin Nacho Pérez, se decidirá esta misma semana.