El CUC Villalba de David Bohega corta a duras penas su hemorragia casera ante el Torrejón (2-2)

El CUC Villalba volvió a puntuar en la Ciudad Deportiva casi cinco meses después de aquel lejano 0-0 ante el Alcorcón B, que a muchos ya les parecía cosa de la prehistoria. Lo hizo con un 2-2 ante el Torrejón, en un partido de bajo nivel, con más goles que juego, y en el que llegó a estar en el alambre, tanto en la primera mitad, donde no generó ni una ocasión de gol, como al final, cuando el cuadro del Corredor se le echó al cuello. Entre medias, sí hubo lugar para la esperanza, en media hora larga de la segunda parte en la que sí mostró parte del repertorio que le permite ser aún el segundo mejor equipo a domicilio de la Tercera RFEF.

Está por ver si de verdad el empate obtenido es un punto de inflexión, porque el calendario corre inexorable, con cuatro puntos que remontar a la salvación, o es un vaso de agua en el desierto. La afición, que cree que le han vendido gulas por angulas, tras la proyección de nueve películas muy similares con el saldo de dos puntos sobre 27 posibles en la Ciudad Deportiva, aún confía en que el Unión Collado Villalba salga a flote de alguna manera. Por eso se valoró el empate como un punto de partida al que agarrarse, en espera de ver los verdaderos efectos tanto del nuevo cambio en el banquillo como el de los refuerzos invernales.

El nuevo entrenador debutó cortando la racha de siete derrotas seguidas en la Ciudad Deportiva, en un partido en que los amarillos transmitieron síntomas preocupantes en la primera parte y buenas sensaciones en la segunda, cuando llegaron los goles de Álex Krehly Sergio Sousa para anular las dos ventajas torrejoneras

Debut de David Bohega

Ante la AD Torrejón no sólo debutó el entrenador, David Bohega, sino también Carlos Pantoja en la portería y Rabadán en el lateral, supliendo a Cova en la segunda parte. Además, en el plan inicial, dibujado en un 1-4-3-3,fueron titulares Mateo Caprile y Sergio Sousa, dos fichajes que parecen interesantes. Sin embargo, al que se echó en falta, al menos en la primera parte, fue a Héctor Peña, baja en el equipo para fichar por el Ilicitano. Sin él, el ataque quedó tuerto, a expensas de la inventiva de Montero en la izquierda, y con Cova sin un socio claro en la derecha, dentro de un contexto de juego pastoso en el medio, con el Torrejón plantado para penalizar el fallo. Éste llegó a los 20 minutos en forma de desajuste defensivo, bien castigado por Mansour. El central, recambio del capitán Benítez, convocado entre semana por la selección madrileña, apareció solo en el segundo palo con tiempo de controlar, acomodar y fusilar a Pantoja, haciendo bueno un centro desde la derecha.

El 0-1 afianzó el plan torrejonero de robo y salida, con el Villalba enfrascado en posesiones estériles y una incapacidad manifiesta para generar desequilibrios. En todo el primer tiempo, aparte de córners y centros laterales sin remate, lo único potable fue una combinación entre David Fernández, Caprile y Montero que éste, de nuevo de lo mejor del equipo, culminó con un disparo centrado a las manos de Nacho Esteban. Con más espacios para correr, el Torrejón fue más práctico y rozó el 0-2, cuando Mario Jiménez, solo en el área, cruzó demasiado un cabezazo que se le fue cerca del palo, con Pantoja ya vendido. No hubo más en una primera parte en la que el Torrejón vivió muy cómodo, con la organización atrás y el oportunismo arriba como virtudes.

Reacción en la segunda parte

Tras el descanso, el Villalba salió con otro ímpetu y, sobre todo, con un Pablo Montero más afilado en sus intentos. El hábil extremo puso un gran balón a Chamón a espaldas de la defensa que el ex del Rayo B, sobre la salida del portero, trató de culminar con un toque de exterior al palo largo. La jugada, nada más reanudarse el partido, cambió las sensaciones del Villalba, que pasó a dar más contenido a sus ataques y a ejercer un claro control sobre el partido.

David Bohega buscó aún más mordiente, metiendo a Ot Remolins y haciendo debutar a Rabadán, y el equipo fue coleccionando llegadas cada vez más claras sobre el área torrejonera. En una de ellas, de nuevo Montero puso un buen centro para el remate de Chamón, que no atinó con el empate. Sí lo hizo a renglón seguido Álex Krehl, tras recibir un pase en profundidad que el estadounidense captó por el pasillo central, para dejar atrás por piernas a sus marcadores y batir a Nacho Esteban en su salida, en lo que fue el cuarto gol del ariete en Liga.

Los del Corredor tuvieron la victoria en su mano en el tramo final, cuando los cambios de Míchel Carrilero echaron atrás a un Villalba que acabó dando por bueno el empate como posible punto de inflexión

Sin embargo, el Villalba no pudo aprovechar la dinámica favorable del partido, primero porque poco después del 1-1 le pillaron en un desajuste, que Mario Jiménez castigó con el gran gol a la contra que volvió a adelantar a los visitantes, y segundo porque Míchel Carrilero intervino para bien con los cambios, que dotaron al Torrejón de una respuesta contundente después de que Sergio Sousa, con un gran cabezazo, devolviese las tablas al marcador con su primer gol con la camiseta amarilla.

Las entradas de Cayena, Jorge García y Chamadoira, más la anterior de José Ignacio, sirvieron para volcar el juego hacia el campo de un Villalba que empezó a dar por bueno el empate y acabó sometido por el Torrejón, obligado a una defensa agónica que le permitió contener a duras penas ataques que se le metían hasta la cocina. Tras siete minutos de añadido, encajó el empate como un bálsamo.

Ahora al Villalba le espera la RSD Alcalá en las amplitudes del Virgen del Val -domingo, 12:00 horas-, con Álvaro Portero y David Barca afilados como cuchillos, pero ya con Etiene Etoo de vuelta, tras dos partidos de sanción. Plaza grande y ganadería complicada, con la salvación a cuatro puntos.