El CUC Villalba conquista el García de la Mata con fútbol (1-3) y logra su quinto ascenso a Tercera División

El CUC Villalba regresó a Tercera División pasando por encima de la presión con un excelente ejercicio futbolístico, con el que sometió al Periso y acabó conquistando el García de la Mata, el campo maldito de la caída a Primera Regional en 2019. Aquel fantasma ni se asomó por Ciudad Lineal. No lo permitió un Villalba que funcionó como una orquesta perfectamente sincronizada. Ni siquiera le afectó el haber desperdiciado hasta cinco ocasiones clamorosas antes del primer gol de Borja Acha, que llegó rozando la media hora de juego. En realidad, la mayor incertidumbre para conseguir el ascenso llegó tras el pitido final del árbitro, Castilla Aparicio, pues aún hubo que esperar más de 20 minutos para que se confirmase la derrota de la Concepción ante el Villanueva del Pardillo.

Jugadores, cuerpo técnico y directiva se mezclaron con los aficionados villalbinos desplazados para seguir ese desenlace, con la relativa tranquilidad del 0-2 que el Villanueva del Pardillo había subido al marcador cerca del final. Cuando se confirmó, todos dieron rienda suelta a la celebración y la llevaron desde la rampa de acceso al estadio hasta el vestuario.

A los amarillos no les tembló el pulso por la presión de la jornada final: dominaron al Periso desde el inicio, lo doblegaron con goles de Borja Acha, Vivi y Braiden, y terminaron festejando la consecución del objetivo casi 20 minutos después de acabar el partido, cuando se confirmó la derrota de la Concepción ante el Villanueva del Pardillo

La mayor carga de emoción estuvo en Pepón y sus ayudantes, directores de un ascenso que pareció escaparse en varios momentos de la temporada, en especial tras aquel empate en Coslada con dos expulsados que relegó al equipo a seis puntos del objetivo, y para el que ha habido que superar un sinfín de vicisitudes, la mayoría localizadas fuera del ámbito deportivo.

El resultado final encumbra al entrenador, que iguala a Antonio Martín con la consecución del doble ascenso a Preferente y a Tercera División, y salda la deuda con su ayudante, Borja Fernández-Blanco, el último técnico amarillo en Tercera,con aquel equipo de circunstancias que se sabía sin opciones de permanencia desde el primer día. La emoción de ambos fue especialmente conmovedora, por el tesón, la paciencia y la fe que han logrado combinar con su buen hacer como gestores de un equipo que ha acabado como un tiro, con 18 puntos logrados de 21 posibles en las últimas siete jornadas.     

Vendaval de salida

Pepón encaró la jornada final muy seguro en dos ideas: el planteamiento, calcando la alineación que venía de ganar con solvencia al Alcobendas, y lo relativo al aspecto anímico, repitiendo a sus jugadores que se olvidaran del Canillas y de la Concepción y se centraran única y exclusivamente en sacar adelante el partido ante el Periso.Todo le funcionó de salida: en el primer minuto, Quique Casado dio el primer aviso con un disparo que paró con apuros el portero local; a los tres minutos, Diego Altamirano le puso un balón de gol a Borja Acha, cuyo remate a bocajarro lo sacó de nuevo Monte; y de seguido, Vivi erró dos ocasiones clamorosas en situaciones de mano a mano, para mayor gloria del guardameta del Periso, que también le sacó a Borja Acha una quinta ocasión.

Todo eso hizo el Villalba en 16 minutos, ante un Periso a merced que sólo se asomó tímidamente al área de Sergio Iglesias en arranques individuales de sus puntas, Messi y Mario, y que sufrió un suplicio con la movilidad y precisión de todo el frente de ataque serrano: a partir de la seguridad de Guadaño y Jonathan, más la proyección por las bandas de Juancar y Mendi, y el equilibrio de LuisjaJuárez y Álvaro, ambos muy precisos, Casado y Altamirano camparon a sus anchas en su papel de conectar con Acha y Vivi, casi siempre con pases verticales o en diagonal al espacio, cargados de veneno. Sólo la falta de acierto en el remate y el portero Monte aplazaron el primer gol del Villalba, que terminó cayendo como fruta madura al filo de media hora: Casado chutó con violencia, Monte rechazó como pudo y Borja Acha, muy vivo de reflejos, remachó de cabeza el 0-1 cerca del área chica.

En ese momento, el empate del Canillas y la derrota de la Concepción hacían campeón al Villalba, cuya ventaja le invitó a tomarse un respiro; no de intenciones, sino de ritmo. El Periso aprovechó para asomar y coleccionó hasta tres llegadas peligrosas en el tramo final de la primera parte, la más clara en una buena jugada individual de Roa,que el carrilero local culminó con un disparo que se marchó muy cerca de la cruceta.

Pepón López Cortijo entra en la historia del club con Antonio Martín, como segundo entrenador que logra subir a Preferente y a Tercera: Sabíamos que si ganábamos aquí el fútbol nos iba a devolver todo lo que hemos sufrido. Es una alegría inmensa

El Villalba sentencia

El paso por la caseta devolvió al Villalba a su versión más afilada. A diferencia del primer tiempo, el segundo gol no se hizo de rogar y llegó en dos minutos, los que tardó Juancar en hacer un jugadón por la derecha, yéndose de dos adversarios, y filtrar un balón al interior del área para Casado. El 10, con temple y visión, sirvió a la media vuelta al punto de penalti, el balón salió rechazado y le llegó sobre la frontal a Vivi, que ajustó con calidad su derechazo de rosca a un ángulo imposible para Monte.

El gol del cercedeño, en la más difícil de sus ocasiones, dio el margen suficiente para que el Villalba pasara a un fútbol no tan vertical y sí de más control, siempre, eso sí, a partir del balón. El partido decayó de ritmo y hubo hueco para que ambos equipos homenajearan a Cordo y Messi cuando fueron sustituidos, con un emocionante pasillo conjunto de tributo a dos jugadores emblemáticos de la escuadra madrileña.

Como ante el Alcobendas, el Villalba refrescó su delantera en el tramo final y ello le llevó al tercer gol, que llegó en una gran jugada de Braiden. El punta se fue en una baldosa de dos marcadores, se quedó solo ante Monte, y batió al portero con una semivaselina de muchos quilates. Esta vez, los jugadores dieron rienda suelta a su alegría y se fueron a formar una piña hacia la grada, intuyendo el final feliz.

El Villalba sube como segundo clasificado tras acariciar su tercer título de Liga en Preferente, que le quitó el Canillas con un gol al San Fernando en tiempo añadido

El Periso respondió al 0-3 generando varias ocasiones, pero el empujón final sólo le valió para maquillar con el 1-3 de Toni, cabeceando desde cerca un balón botado desde el córner. Mas la suerte ya estaba echada, y sólo la cautela por el marcador favorable pero no cerrado de la Concepción postergó el festejo final. El Villalba vuelve a Tercera División para hacer compañía al Galapagar, una situación inédita en el fútbol serrano, cuyas incursiones a categoría nacional siempre han venido en solitario, nunca a dúo. El fútbol serrano vivirá por tanto una temporada histórica en el Grupo VII de la nueva Tercera RFEF de 16 equipos, a partir del último fin de semana de septiembre.

CUC VILLALBA: Sergio Iglesias; Juancar, Jonathan, Jaime Guadaño, Mendi; Luisja Juárez; Diego Altamirano (Santi Lagreca, 78’), Quique Casado (Víctor Salcedo, 64’), Álvaro, Vivi (Juan Olalla, 87’); y Borja Acha (Braiden, 78’).

PERISO: Monte; Roa (Paramio 70), Emilio (Jaime 70), Loren, Guille; Toni(A), Andrés, Boti, Cordo(Ismael 57); Messi (Lee 61) y Mario.

ÁRBITRO: Diego Castilla Aparicio. Buena actuación

GOLES: 0-1, Borja Acha (29’); 0-2, Vivi (47’); 0-3, Braiden (80’); 1-3, Toni (90+2’)

INCIDENCIAS: Partido de la 34ª y última jornada en el Grupo 1 de Preferente, con unos 250 espectadores en el campo federativo del García de la Mata, en mañana menos calurosa de lo previsto. El CUC Villalba, arropado por decenas de seguidores, festejó el ascenso unos 20 minutos después del final del encuentro, tras confirmarse la derrota de la Concepción ante el Villanueva del Pardillo.

Jaime Fresno

Send this to a friend