Carlos Verona: “Quiero despedirme de Movistar con una gran Vuelta a España”

Carlos Verona brilló con luz propia en el Campeonato de España de San Lorenzo de El Escorial, su pueblo, pero ello no le valió para entrar por quinta vez consecutiva en el Ocho del Movistar para el Tour de Francia, anunciado al día siguiente con otras bajas llamativas, como las de Imanol Erviti o el flamante campeón nacional de ruta, Oier Lazkano. El ciclista gurriato, todavía en Madrid disfrutando de la familia, había revelado en su diario de carrera que tenía dos bolsas preparadas, una con toda la ropa para las vacaciones, y otra con culottes y maillots, por si era llamado a filas y tenía que salir rápido hacia Bilbao, donde el sábado arrancó la Grande Boucle. Finalmente, sucedió lo primero y tuvo que asumir su ausencia en el Tour, la carrera que conoció de la mano del Movistar, y en la que no había fallado en los últimos cuatro años.

“No me he llevado decepción. Sabía que, al hacer el Giro, el Tour era una posibilidad que quedaba en el aire, porque había corredores que lo han preparado a conciencia en altura, y yo era un poco el undécimo y estaba a lo que pudiera pasar, a si alguno fallaba. Pero bueno, me pongo un poco en la piel de Eusebio -Unzúe, mánager general de Movistar- y lo más lógico es que me recupere bien del Giro y que me prepare mejor para la Vuelta, porque al final siempre los que corren el Tour no están al cien por cien para la Vuelta, y así se puede atender a todo. Los que han preparado a conciencia el Tour son corredores muy buenos que están en buena forma, creo que no me echarán de menos. Y sin embargo, creo que para la Vuelta jugamos en casa, va a ser una Vuelta muy bonita y yo puedo jugar un papel más crucial”, explicó el corredor, con su habitual tono diplomático, aunque esta vez no exento de cierto poso de resignación.

Verona reconoce que “sí que da un poco de rabia por la buena forma que tenía en el Campeonato de España, tenía de las mejores piernas de mi vida, me he preparado bastante a conciencia en el último mes, pero sabía que podía pasar. Ya está asumido y tengo la cabeza puesta en recuperar, en ver a la familia y en ir unos días a la playa, que hace años que no voy. Y a partir del 10 o el 15 de julio, me pondré las pilas para hacer un bloque de altura y poder estar en la Vuelta”.

Futuro lejos del Movistar

La ausencia de Verona en el Tour abunda en lo que se ha venido diciendo casi desde el inicio de temporada: que su futuro está lejos del Movistar y que el cambio de equipo es inminente, algo ya tratado en varios artículos de la prensa especializada en ciclismo. Algunos medios, como As, Marca, o la propia Gazzetta dello Sport, ya vienen situando al sanlorentino como futuro corredor del Ineos Grenadiers, la súper estructura de David Brailsford, información que ha hecho que en determinados foros se interprete su ausencia en el Tour como un castigo del equipo Movistar por no renovar su contrato.

Carlos Verona niega la mayor, y de paso habla en clave de despedida: “Lo de no estar en el Tour para nada es un castigo por no renovar. Es cierto que mi futuro pueda estar lejos del Movistar, pero esto es deporte profesional y, como en cualquier ámbito de la vida, todos cambiamos. Esa posibilidad está abierta y no hay ningún tipo de resquemor. Todo ha ido cordial, Movistar es una familia y han sido cinco años muy buenos aquí. Ahora seguramente vengan nuevos retos, pero antes quiero terminar de la mejor manera posible y ellos también quieren que así sea. Espero despedirme de Movistar con una gran Vuelta a España y poner un buen broche a estas cinco temporadas con el equipo”. Antes de la ronda española, Verona maneja la posibilidad de regresar a la competición en la Vuelta a Burgos, aunque de momento todo son hipótesis en cuanto a los calendarioss, como suele pasar cuando el Tour de Francia todavía está por disputar.

Salida a final de año

A diferencia de lo sucedido en julio de 2016, cuando dejó el Quick Step para fichar por los australianos del Orica, el ciclista gurriato asegura que su marcha del Movistar no se producirá aprovechando la ventana de traspasos que se abrirá este verano: “Habrá que esperar. Tengo contrato con Movistar hasta el 31 de diciembre y, ahora mismo, mi mayor motivación es terminarlo de la mejor manera con el equipo, en ayudar a un compañero a ganar la General en la Vuelta; y si por el camino viene una etapa como pueda ser la de la Sierra de Madrid, mejor que mejor”.